Hoy luego de pasar, el día más difícil de mi vida, me doy cuenta que la vida es muy valiosa, me doy cuenta que en un solo segundo lo puedes perder todo, es cuestión de un momento cuando te llega la hora, hoy más que nunca doy las gracias al de arriba de haberme salvado y apoyado en la prueba mas dura que he vivido, gracias al cielo me doy cuenta que la gente sigue siendo como Pilatos o como Judas "Iscariote" (ya que estamos en semana santa) y si al igual que ellos y a veces hasta de peor forma o te dan la puñalada por la espalda o simplemente se lavan las manos y se van, gracias a Dios todavía el ángel de mi guarda, aquella persona que tanto amo siempre viene a mi rescarte y mejor que cualquier ángel San Gabriel frente a Maria, logra el milagro de hacerme sonreír, me hace renacer y me da fuerzas para saber que realmente no estoy sola, todavía cuento con él ( a pesar de todo), sin embargo el día que pasé no se podrá olvidas y aunque ya pasó las huellas que dejo en mi corazón, en mi cuerpo y en mi alma se quedaran conmigo para siempre, es algo que nunca me perdonare, espero por lo menos tratar de superarlo, como todas as cosas que a uno le suceden en la vida, pero de algo si estoy segura y es que el arrepentimiento y cambio van a estar difíciles, pero son necesario de hacer desde ya, pues de una u otra forma es mejor reaccionar, espero muy pronto que la ley divina haga lo que debe hacer, por ahora ya solo queda esperar y dejar que el transcurso de mi maravillosa vida siga, pues lo más importante es aprovechar cada instante que tenemos, porque en cualquier momento de pueden arrebatar la vida y creo que no es justo el no haber intentado si quiera por un instante haber sido feliz, elefantito, gracias por todo y no olvides que te amo!!!
F ue uno de esos días, en que todo es permitido, el motivo, “la festa mayor”, desde la mañana la gente llegaba en “manadas”. No era ni medio día y ya se perdían los mil y mil rostros entre la multitud. E l lugar estaba repleto de diversas culturas, razas y movimientos. Llegada la tarde la música invadía los más de cinco escenarios diferentes, el alcohol, la hierba, la comida, el tabaco y la música lógicamente… ya iban haciendo sus estragos… E n su mayoría jóvenes, dispuestos a no llegar temprano casa, unos cuantos eran rapados, tatuados, musculosos, otros mechudos, flacos, unos cuanto “góticos”, raperos, salseros, punkqueros… jajaja, era como un salpicón de todo…. Había espacios para todos los gustos, lesbianas, transformistas, metro sexuales, gays, maricas, afeminados, en fin… S e movían descortinadamente al sonido de los platos del D.J. de música electrónica, otros movían su brazo tras las rimas de los Mc’s de hip-hop, otros movían el esqueleto con el son cubano, otros como en un cue