Ya no se porque toda la esencia de lo que creía propio se ha venido desvaneciendo hace un tiempo... me siento traicionada... es como si me hubieran robado algo, algo muy profundo, una parte de mi, algo sin lo cual no soy yo, ahora no me siento la misma, me siento como otra persona, metida en este cuerpo, mis ojos me engañan, e intentan persuadir a mi mente para que crea que no ha pasado nada, pero eso no es cierto, ha pasado mucho, más de lo que esperaba, e retrocedido más de lo avanzado... e borrado mi trabajo, he vuelto a cometer el mismo error, me estoy e... y ahora nada se hace de forma planeada, pensada, digerida... todo fluye en una cascada incesante de sentimientos e impulsos, las palabras delatan a mi corazón y mientras tanto el vacío inmenso de mi alma, cubre cada rincón de mi ser... ya no se que pasa, ya no se si lo que he perdido era lo que alguna vez se había convertido en el rumbo de mi vida, en mi meta a alcanzar, ahora derrotada dejo volar mis pensamientos, pierdo cada una de mis palabras, en letra muerta. dejo pasar ante mis ojos la oportunidad de volver a revivir, ando confundida, depresiva, desolada sin darme por enterada, creyendo estar feliz, bien e integra, pero la realidad se puede sentir y ver con una simple mirada rápida, no ha ni la mínima necesidad de hacer un esfuerzo por ver el interior, pues de lo profundo se emana todo aquella pestilencia que se ha ido apoderando de mi, soy presa de nuevo de mi misma, y no encuentro la manera de deshacerme de estas cadenas que me atan a la oscuridad, anhelo encontrar de nuevo el camino, esa luz que tanto me ayuda y me mantiene viva, ese pequeño zumbido al oído que nunca me abandona, por favor regresa a mi, como una mano amiga, lo pido implorando de nuevo... no me dejes así, sola en este sosiego. Pues la verdad ya no se... que será de mi.
F ue uno de esos días, en que todo es permitido, el motivo, “la festa mayor”, desde la mañana la gente llegaba en “manadas”. No era ni medio día y ya se perdían los mil y mil rostros entre la multitud. E l lugar estaba repleto de diversas culturas, razas y movimientos. Llegada la tarde la música invadía los más de cinco escenarios diferentes, el alcohol, la hierba, la comida, el tabaco y la música lógicamente… ya iban haciendo sus estragos… E n su mayoría jóvenes, dispuestos a no llegar temprano casa, unos cuantos eran rapados, tatuados, musculosos, otros mechudos, flacos, unos cuanto “góticos”, raperos, salseros, punkqueros… jajaja, era como un salpicón de todo…. Había espacios para todos los gustos, lesbianas, transformistas, metro sexuales, gays, maricas, afeminados, en fin… S e movían descortinadamente al sonido de los platos del D.J. de música electrónica, otros movían su brazo tras las rimas de los Mc’s de hip-hop, otros movían el esqueleto con el son cubano, otros como en un cue
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